El viernes pasado mi equipo y yo jugamos un partido. Era contra el Alcalá un equipo muy bueno. Primero entrenamos un poco, para que no tuviéramos una lesión. Cuando empezó el partido, yo tenía un poco de miedo porque esos jugadores tenían tacos duros. En la primera parte le metimos 2 goles al Alcalá. Nuestro entrenador nos dijo que no nos rindiéramos. En la segunda parte le metimos 4 goles más. Al final les ganamos 6-1.Y me lo pasé muy bien.
Por Carlos García.